Hoy
otra receta del curso de cocina, como verán también lleva fruta, esta vez se
trata de mandarinas y dátiles.
Se
trata de una combinación de dulce y salado, que aunque paradójica, obtiene un
resultado sorprendente. La receta original es la que les presento, pero el pavo
se puede sustituir por pollo o incluso por filetes finos de ternera o cerdo.
Sin embargo el sabor menos pronunciado de la carne de ave no sobresale en el sabor final.
Como
la receta original de la profesora he utilizado mandarinas clementinas, pueden
usar otra variedad, pero que sean firmes y jugosas. Los dátiles no deben ser
demasiado dulces, tengan en cuenta que muchas veces nos venden dátiles que han
estado en solución de glucosa y así aumentan su dulzura artificialmente. El
hecho de utilizar sin hueso es para facilitar el comer el plato sin dificultad,
por eso sino encuentran dátiles sin hueso entreténganse en deshuesarlo, sus
comensales se lo agradecerán. Si pueden utilizar hojas frescas de salvia mejor,
sino recurran a las secas y molidas. Si
no tienen caldo de pollo pueden recurrir al de brick y en último caso agua y
una pastilla de caldo.
Les
recomiendo que lo prueben, olvídense de sabores tradicionales y den este salto
a la mezcla de sabores de este plato, la carne, las frutas y la salsa hacen un
conjunto que no les defraudará.
Espero
seguir ofreciéndoles recetas del curso
anterior y del actual, aparte de trucos y consejos nos está descubriendo
recetas originales y buenas.
Vigilen
su alimentación, coman variado, pero equilibrado.
INGREDIENTES:
Para 4 personas
- 800 gr de pechuga
de pavo en filetes finos
-500 gr de
mandarinas clementinas
- 200 gr de dátiles
deshuesados
- 40 gr de almendras tostadas picadas
- 90 gr de azúcar
moreno
- 50 gr de
mantequilla
- ½ limón
- Unas hojas de
salvia (Tres o cuatro)
- 1 cucharadita de
canela molida
- ¾ lt de caldo de
pollo
- Aceite de oliva
virgen extra, sal Costa, pimienta
PREPARACIÓN:
Precalentar el horno a 160ºC.
Pelamos las mandarinas y separamos los gajos sin que se
rompan, reservamos.
En una sartén con un poco de aceite freímos los filetes
de pavo, pero sin dorarlos, pues se acabarán de hacer luego. Los vamos sacando
de la sartén y los ponemos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de
aceite. Reservamos.
Eliminamos el exceso de grasa de la sartén y añadimos el
caldo junto con una cucharadita de canela molida y las hojas de salvia. Dejamos
que llegue a hervir 5 minutos y retiramos del fuego.
En otra sartén derretimos la mantequilla, añadimos el
azúcar y dejamos caramelizar ligeramente, que no llegué a formarse un caramelo
duro. Veremos que empieza a caramelizar cuando la mantequilla fundida flote
sobre el azúcar.
Añadimos los dátiles, los gajos de mandarina y el zumo del
medio limón. Damos unas vueltas con suavidad para mezclar las frutas con el
caramelo sin que se rompan los gajos.
Añadimos el caldo reservado y dejamos que cueza unos 5
minutos a fuego lento y le añadimos las almendras picadas.
Ponemos los filetes de pavo en una bandeja para el horno,
tiramos la salsa por encima y lo terminamos de hacer 5 minutos al horno.
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